jueves, 22 de noviembre de 2012

Iván Kaviedes, una gloria del fútbol nacional



Iván Kaviedes, una gloria del fútbol nacional.


El futbolista Jaime Iván Kaviedes quien en la actualidad pertenece a los registros de Aucas, dejó entrever que el compromiso a jugarse el domingo próximo a las 12:00 ante Pilahuín Tío podría el último de su carrera profesional.  De ganar Aucas este compromiso, será el retorno a la Serie B del fútbol profesional ecuatoriano. La trayectoria del ‘Nine’ que empezó a muy temprana edad, estuvo marcada por varios altibajos en su vida personal, que incluso lo alejaron de las cachas de fútbol durante algunas temporadas. Kaviedes, se inició en clubes de Santo Domingo de los Tsáchilas como el Club Rosales II y el colegio San Marcos en donde ya se destacaba por su calidad goleadora. Posteriormente, llegó a Emelec en 1998, equipo en el que destacó haciendo dupla con Carlos Alberto Juárez consiguiendo además  del sub campeonato ecuatoriano el título de máximo goleador  del mundo, al marcar 43 goles en 39 compromisos y convirtiéndose en el jugador con mayor cantidad de goles en el torneo local. Para ese año, fue reconocido como el mejor futbolista ecuatoriano y ser el primero de los futbolistas nacionales en fichar por un equipo  de la Serie A italiana (Peruggia). Sin embargo, después de la salida del Emelec, tuvo dificultades para afianzarse en algún equipo debido en gran medida a su comportamiento. El periplo de Jaime Iván Kaviedes, empieza en 1999, cuando llegó hasta el Peruggia italiano, pero no terminó el año allí y después, pasó al Celta de Vigo español. El año siguiente, pasó al Puebla de México y después al Real Valladolid. 


En el 2001 fichó por el FC Porto y en el 2002 regresó al país para formar parte del Barcelona Sporting Club sin quedarse demasiado tiempo allí regresando al final del mismo año al equipo  guayaquileño. 




Regresa al Puebla en 2003 y después pasó en 2003 al Deportivo Quito donde encontró a su mejor amigo el ‘Toro’ Varea, jugador con quien hizo dupla y crearon el tiro del chanfle combinado con el tiro del tigre, una jugada que será recordada por siempre en el balompié nacional. 

Barcelona Sporting Club volvió a contratar al ‘Nine’ en 2004, y posteriormente, pasó al Crystal Palace inglés en calidad de préstamo. En 2005, nuevamente regresa a filas toreras para a mitad de año jugar en Argentinos Juniors. 



El 2006 fu el último año que jugó para Barcelona Sporting Club, porque en 2007 pasó a El Nacional y en el equipo militar terminó esa temporada. Liga de Quito lo contrata en 2008, pero por inconvenientes económicos, salió del equipo y estuvo sin jugar hasta el 2009, cuando fue hasta Liga de Portoviejo, pero tampoco pudo jugar en el equipo manabita. 

En 2010 y tras dos años sin jugar en el balompié profesional y haber permanecido en una clínica de rehabilitación llegó hasta el equipo ambateño de Macará. Para el 2011, regresó a El Nacional, y cuando empezaba el  2012 llegó a Deportivo Quito, equipo en el cual solo hizo la pretemporada, ya que desde ese mes anunció su retiro del fútbol profesional. 


Sin embargo, a mediados de año, Aucas lo llamó para que se incorpore como refuerzo del equipo para conseguir el ascenso a la Serie B, ya que el equipo oriental esta temporada permanece en el torneo conocido como Zonal de Ascenso. Estando en Aucas, se produjo un episodio que manchó su actuación después de ser detenido por supuestamente conducir en estado etílico y agredir a policías. 

Jaime Iván Kaviedes también fue parte de la Selección ecuatoriana de fútbol durante 55 ocasiones. El debut con el conjunto tricolor, se produjo el 14 de Octubre de 1998 cuando Ecuador enfrentó a Brasil en compromiso amistoso. 


El miércoles 7 de noviembre de 2001 es recordado por la afición ecuatoriana porque el ‘Nine’ convirtió el gol de la histórica clasificación del combinado tricolor a su primer Mundial de Fútbol. Sin embargo, Jaime Iván Kaviedes, también fue parte de la Selección ecuatoriana de fútbol que caldificó al Mundial de Alemania 2006, al anotar el 3-0 marcador definitivo, sobre Costa Rica. 


















Fuente: El Comercio

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