La ineficacia ofensiva de Barcelona para concretar las opciones de gol frente al arco de Gremio le significó una derrota en el estadio Monumental, que complica las aspiraciones toreras de acceder a los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
Pero si los canarios fueron en extremo erráticos en la definición, todo lo contrario fue su rival brasileño, que de tres ataques convirtió uno. Esto le da la ventaja para el duelo de vuelta en Porto Alegre, que se jugará el 24 de octubre.
Fueron 11 las ocasiones claras que tuvo Barcelona para vulnerar la portería de Marcelo Grohe, quien se convirtió en la figura del encuentro.
El cúmulo de fallas en la definición comenzó con Narciso Mina. 'Nacho' arrebató un balón en mediocampo, avanzó con pelota dominada y solo frente a Marcelo remató, pero el meta contuvo el tiro.
En menos de tres días, Mina volvía a errar una inmejorable ocasión. Antes la tuvo frente a El Nacional, por el campeonato ecuatoriano.
Los locales generaban porque eran superiores. Damián Díaz y Michael Arroyo por izquierda combinaban velocidad y precisión para ceder balones a sus compañeros.
También por las puntas Barcelona fue incisivo. Roosevelt Oyola centró y un remate de Brayan De la Torre fue desviado por Vilson.
La bola quieta fue otra de las armas del Ídolo. Arroyo pasó el balón por encima de la barrera en un tiro libre, que se fue por pocos centímetros arriba del horizontal.
El juego colectivo de los amarillos incluso daba oportunidad a que los laterales lleguen por el centro. Roosevelt recibió un pase de Díaz y remató, pero Grohe rechazó.
Una pelota en el horizontal tras un cabezazo del defensa torero Jairo Campos daba para pensar que el choque terminaría empatado en la primera mitad, pero a los 44 llegó el gol visitante.
Un tiro libre ejecutado por Elano fue aprovechado de cabeza por Werley ante las licencias otorgadas por Campos y Frickson Erazo, quienes no incomodaron en el remate.
En la complementaria, la tónica del partido no varió, un cuadro local atacando y Gremio apelando al juego defensivo.
Tanta era la insistencia de los dueños de casa que Anderson Pico, en un intento por sacar el balón de cabeza, por poco la mete en su arco.
Gustavo Costas ordenó el ingreso de Juan Carlos Ferreyra para fortalecer el ataque, sin embargo, 'el Tanque' también estuvo impreciso y solo ante Grohe la envió por arriba del horizontal.
La última para Barcelona se originó a los 90 minutos. Erazo, mezclado entre los arietes, envió un cabezazo que fue sacado de la raya por Souza.
Con aquella opción se fueron las ilusiones de 45.000 espectadores que esperaban al menos un empate.
Ahora el cuadro amarillo está obligado a buscar la clasificación en Porto Alegre, donde el único resultado que le sirve es una victoria.
Gustavo Costas
"Ellos en la única pelota parada nos metieron el gol, sin embargo, este ha sido el mejor partido desde que estoy acá".
Jairo Campos
"Dejamos todo en la cancha, la actitud siempre fue muy buena, pero estamos pasando por una racha sin fortuna".
Fuente: Expreso
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