martes, 30 de octubre de 2012

José Horacio Basualdo es un estratega metódico, obsesionado y anecdótico



José Horacio Basualdo es un estratega metódico, obsesionado y anecdótico

Tiene la virtud de atrapar la atención de quienes lo escuchan. Es como esos abuelos que nutren a sus nietos con historias fantásticas… Unas “suenan” bastante reales, otras bien podrían nutrir alguna obra de ficción; lo cierto es que ninguno de los jugadores de Técnico Universitario se pierde un solo detalle de las experiencias y anécdotas que el técnico José Horacio Basualdo comparte con ellos antes de un entrenamiento o durante las concentraciones previas a los partidos.

La más pedida es la del beso entre Diego Armando Maradona y Claudio Caniggia, cuando jugaban en Boca Juniors, en 1996, durante un Superclásico ante River Plate. Basualdo, mediocampista “xeneize” en esa época, recuerda perfectamente ese momento. “Si ‘Cani’ le hace un gol a River yo le doy un piquito", recuerda Basualdo que les dijo Maradona después del último entrenamiento previo a ese cotejo.

Todos pensaron que se trataba de una broma, pero Diego cumplió con su palabra. Durante el partido, que se disputó el 14 de julio de ese año, Boca goleó a los “millonarios”. Claudio anotó tres goles y también se ganó tres besos de Maradona.

Esa historia se puede repetir las veces que sean en la concentración de Técnico Universitario, pero siempre provoca la misma atención. Así lo cuenta el capitán y figura del equipo, Álex Colón. “Nadie se duerme. Podemos pasar horas escuchándolo y siempre cuenta con la misma atención”, le reveló ayer el mediocampista creativo a El Telégrafo, vía telefónica, 24 horas después del triunfo del “Rodillo Rojo” ante Barcelona que le permite, momentáneamente, ser el puntero de la segunda etapa del Campeonato Nacional (26 puntos).

Al arquero argentino Sebastián Blázquez le gusta escuchar las experiencias de Basualdo con la selección argentina, en los mundiales de 1990 y 1994. Lo que vivió en el primero, que se disputó en Italia, lo ayuda a transmitirles “compromiso y amor propio”.

En ese Mundial, Maradona sufrió una lesión en el tobillo y se le encarnó la uña del dedo gordo del pie izquierdo. Pese a eso jugó. Según Basualdo, para evitar el dolor de la segunda molestia, mandó a recortar los zapatos. “Esa historia nos fortalece y nos reanima siempre. Nos gusta que nos la cuente”, aseguró el guardameta del cuadro ambateño.

El delantero argentino Juan Arraya conoció a Basualdo en 2010. Él jugaba en la Universidad de Concepción y el estratega dirigía a la Universidad de Chile. El jugador, de 26 años, llegó a Técnico Universitario en julio pasado por pedido exclusivo del estratega. Durante todo este tiempo, afirmó, ha aprendido a ser más humilde. “José ha estado entre los mejores del mundo, pero él no se jacta de aquello. Por el contrario, nos dice que aún le falta crecer mucho”.

Aquello quedó en evidencia el domingo pasado, después del compromiso ante los “canarios”. Basualdo fue  honesto  y categórico. No le dio falsas esperanzas a la hinchada ambateña. Solo se remitió a la realidad. “Somos punteros por casualidad, pero lo que más nos preocupa es alejarnos de la zona de descenso”, precisó, durante la rueda de prensa posterior al cotejo. El adiestrador no dejó siquiera que los jugadores celebraran el primer lugar en la tabla de posiciones. Así lo aseguró el defensa central Argelis Moreira.

En el vestuario, apenas finalizó el partido, abrazó y felicitó a cada uno de los muchachos. Luego sugirió que realizaran una oración en agradecimiento a Dios. Después les hizo una aclaración: “Hemos ganado un partido importante y estamos primeros, pero nuestra realidad es otra. Este triunfo no significa que somos o seremos finalistas”, les manifestó antes de salir del estadio.

Durante las últimas semanas, el argentino ha bajado su perfil. ¿Qué ha motivado aquello? Él mismo asegura que prefiere mantenerse así porque “ya le dieron duro”. Y es que medios ambateños daban por descendido al equipo  hace dos semanas. En aquella ciudad, parte de la hinchada aún no confía plenamente en el entrenador, debido a que no ha ganado nada con los ocho equipos que dirigió antes de llegar a Técnico.

Basualdo empezó su carrera como técnico en el Deportivo Quito, en 2004, un año después de su retiro del fútbol profesional. Además, ha dirigido al Universitario de Deportes  (Perú), El Porvenir (Argentina), José Gálvez (Perú), Cienciano (Perú), Santiago Morning (Chile), Universidad de Chile (Chile) y Real Mataram (Indonesia).

Hace tres semanas, Wilson Velasteguí, presidente de Técnico Universitario, junto a Eduardo Freire, quien preside la Comisión de Fútbol, se reunieron con Basualdo para plantearle el deseo de su continuidad al frente del equipo para la temporada 2013, independientemente de lo que ocurra al final del torneo. “Esperemos que este año tengamos la alegría de mantenernos en la serie A. Ese es el deseo de todos”, expresó Freire.





















Fuente: El Telégrafo

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